Del poco hablar y del mucho callar se me secó el corazón y vine a perder la razón.
PD. THIS IS A BULLSHIT FREE ZONE

jueves, 30 de junio de 2011

miércoles, 29 de junio de 2011

Se murió.

       Me bastó esa noche mirándote mirándola como un día me miraste a mí para saber que todo había terminado. Sentí que me aplastaban el corazón, un hueco en el estómago, unas naúseas incontrolables y las lágrimas comenzaron a empañar mi vista, todo en cuestión de segundos. Supongo que sentiste mi mirada porque pusiste tus ojos en mí pero fue como si no lo hicieras. Fue como si yo no estuviera ahí, como si vieras justo a través de mi, mirando a todos y a todo menos a mí. Después simplemente volteaste la cabeza hacia otro lado, cerraste los ojos y no volvimos a cruzar palabra en toda la noche. 
       Y yo me quedé ahí, petrificada, escuchando una y otra vez una voz en mi cabeza que decía "¿Qué haces todavía ahí? A él ya no le interesas ¿a caso no lo ves? Levántate y sigue tu camino pues está claro que él ya tomó el suyo." Pero no pude, me quedé a tu lado por varios minutos hasta que escuché a alguien gritando mi nombre, era un amigo que venía acompañado de mi duro regreso a la realidad. 
        Menos mal que mi mejor amiga ya se había marchado y no tenía un hombro para llorar, menos mal que todo estaba tan oscuro para que alguien pudiera darse cuenta de que no volví a sonreir, menos mal que todos habían bebido en exceso y nadie pudo mirarme fijamente a los ojos, menos mal que hace mucho aprendí a disimular y nadie se enteró que esa madrugada se me murió otro pedacito de mi corazón.


martes, 28 de junio de 2011

Los que nos fuimos pero aquí seguimos.

En ésta atmosfera donde las promesas ya no tienen valor y las lecciones aprendidas caducan ¿en qué se puede confiar? No me entiendes y yo no me sé explicar. Y la pregunta del millón no me deja en paz ¿en qué momento cambió todo? ¿O cambié yo? Sus voces apuntan hacía mi, me señalan como eterna culpable, murmuran que todo esto lo merezco, que yo y nadie más me lo gané. Pero a mí no me convencen, no quiero, no puedo y no voy a creerme ese cuento. No tengo ni la más mínima idea a dónde se fueron las palabras de aliento, los abrazos, las ganas de arreglar todo. Parece que el significado de la palabra escuchar se esfumó. ¿Cómo es que la gente ya no sabe diferenciar entre coraje y tristeza? Si supieran ver más allá de lo evidente podrían darse cuenta de que la desesperanza, la vergüenza y el dolor interno son suficiente castigo para un buen rato. Y mejor me quedo callada porque si lo contara estoy segura que terminaría encerrada -quizás amarrada- con medicamentos de por vida. Porque según su realidad así se hacen las cosas, porque según las normas así acabamos los que aún sentimos y vivimos soñando, los que creemos que la vida no solo es un título y no es quedar bien con todos menos contigo mismo, los que no podemos evitar hacer una expresión de asco ante algo que no nos parece, los que dejamos de creer en que actuar bien te trae cosas buenas, los que en ocasiones dejamos de querernos porque nos hicieron sentir poca cosa, los que sonreímos porque ya nos da flojera explicar nuestras lágrimas, los que nos peleamos con la vida y ahora nos burlamos de ella, los que no quisimos censurar nuestras emociones, los que nos cansamos de conceder validez a todo aquello a las que habíamos dicho no, los que una y otra vez conocimos la falacia de la ilusión, los que poblamos nuestra soledad con la escritura, los que hablamos otro idioma que nadie nunca entendió, los que creímos que nunca íbamos a terminar así, los que aprendimos que la mentira y la verdad pudieran ser gemelas, los que nos perdimos en la nada y volvimos, los que nos caímos tantas veces que dejamos de contar nuestros fracasos, los que nos volvimos a levantar sólo para volar y no volver a poner los pies en la tierra, los que no vamos a parar hasta estar bien lejos pero bien contentos.



lunes, 27 de junio de 2011

No fue. Nunca es.

Y estabas ahí, sonriendo frente a mí o caminando en silencio a mi lado.
Y estábamos ahí, habiendo bebido de más o ensordecidos por la multitud.
Y yo estaba ahí, mirándote… o pretendiendo no mirarte.
Y estuvimos ahí como todos los viernes y cada sábado.
Y fueron noches sin sentido y días perdidos.
Y no sabía cómo actuar y tú decías poco.
Y nos besamos y también no nos besamos.
Y lo recuerdo y supongo que tú lo olvidaste.
Y te quise y no sé si me quisiste.
Y seguí otro camino y no me detuviste. 
Y me duele y dudo que te importe.


domingo, 26 de junio de 2011

Pero no quiero.

Si yo quisiera 
tendría un hombre diferente 
todas las noches...
 La cosa es que no quiero.
  
Te quiero a ti. 
¿Pero tú? Pues tú sólo 
me quieres de vez en cuando. 


miércoles, 22 de junio de 2011

¿A ti qué te dice la soledad?

A la soledad ya se le hizo costumbre visitarme por las noches. Cerrar mis ojos es el punto de partida para sus palabras que son siempre las mismas. Yo le digo que se vaya, que no la necesito, que no estoy sola, que me tengo a mí misma. 

Ella me contesta que para estar con alguien, incluso conmigo misma, debo ser menos interesada pero soy asquerosamente frívola. Que me volví tan materialista y ahora solo puedo ver lo superficial. Que estoy seca y me es difícil contemplar otra cosa que no sea yo misma. Que me encuentra hecha un monstruo de mente con alma desequilibrada. Congelada, volcada hacia mí misma

A mi sólo se me ocurre decirle que sus palabras ya no me espantan, que todo eso ya lo sé, que se la ha ocurrido venirmelo a decir muy tarde, que nunca lo había tenido más claro, que lo reconozco pero que sinceramente ya no me importa...





martes, 21 de junio de 2011

Una propuesta a mi conciencia.



Querido pepe grillo: 

Me veo en la penosa necesidad de informarte que tu vocecita me tiene aturdida, me rehúso a seguir con la estúpida cruda moral y los remordimientos. A pesar de todos los estragos que has causado en mi mente quiero demostrarte que no te guardo rencor te otorgo unas vacaciones permanentes.
¿Qué dices?
¿Te irás?

lunes, 20 de junio de 2011

Carta a un viejo amor.

Ahora que empezaba a considerar la posibilidad de que fuera real…
Pero todo fue como un sueño, no duró lo suficiente para conocer el final.

Busqué en tus palabras y tus miradas. Seguí las pistas , me creía mas inteligente. Y entre las bromas, los juegos y las mentiras solo encontré una razón mas para creer menos.
Que ironía, no te quería querer. Y ahora siento tantas cosas y no siento nada. Ya no se que pensar, ni que creer. Prefiero  que acabe, no saber más aunque duela.

Y si era verdad o si era mentira ¿Ya  que puede importar? En este caso termina siendo lo mismo. Nada va a cambiar. No voy a mentir, vaya que disfruté pero me arrepiento de haberme callado. Sólo te reprocho tu cobardía aunque ni siquiera tengo derecho.

Es cierto, el rencor casi llenó el vacío que dejaste pero  preferí hacerle caso a mi dignidad e ignorar a la venganza. Y quiero darte las gracias, pues por ti descubrí que aún puedo y sé querer.
Hoy no tengo las palabras para el día en que te vuelva a ver. Si es que te vuelvo a ver… Ya me da lo mismo si te vuelvo a ver.


domingo, 19 de junio de 2011

Y por eso no te quiero perdonar.

Hay quienes dicen que perdonan por amor, otros por temor a que los resentimientos arruinen su vida, otros lo hacen más que nada por religión, el resto decide no hacerlo y ya. 

Yo, en cambio, creo que el perdón llega cuando dejas de sentir, que cuando perdonas el daño causado por alguien a quien quisiste es porque ese alguien ya no te importa más, porque el cariño se fue muriendo en manos del asco y la desconfianza… hasta que un día ya no encuentras razón para odiarle más porque simple y sencillamente hacia esa persona ya no sientes nada.

PD. ¿Aún quieres que te perdone?



sábado, 18 de junio de 2011

Me voy a fugar.

Alguna vez leí que 

"La locura tal vez consiste en un agudo terror a no ser, en el desentendimiento del mundo y de uno mismo...". 

Y -nunca creí decir esto pero- empiezo a considerar seriamente la opción de volverme loca y así, al fin, fugarme de mí misma, de todo y de TODOS.





(No lo veo tan dificil, aquí a mi alrededor ya creen que lo estoy. Sólo falta convencerme a mí misma que tienen razón.)
 

viernes, 17 de junio de 2011

Pequeño detalle

Todo sería tan 
diferente si supieran...
pero no saben. 


Y sepan de una vez 

que yo no se los voy a decir.

jueves, 16 de junio de 2011

Un caballo que es camello.

Me gustaría ser un caballo pero  soy un camello,
llevando una carga propia, esa joroba:
el peso de la moral.

martes, 14 de junio de 2011

Como es tu costumbre.

Lo dejé pasar una y otra vez. Estoy cansada. Estoy harta. Desgastada y molesta. Quisiera largarme de una vez. Cansada de tus gritos, de tus malos tratos, de tus reproches sin motivo. Quiero descansar de ellos y de ti. Llegué a un punto de indiferencia, me da lo mismo si gritas o golpeas, me da igual si estás o no molesto. Hoy me das lo mismo...

Te juro me dolió. Tomar esta decisión fue lo peor, pero me cansé.  Heriste mi paciencia, poco a poco mi cariño también. Te perdoné lágrima tras lágrima, intenté ser buena confidente, ser más bonita, ser mejor hermana. ¿Y tu…? Tu siempre tenias la razón. Ahora te veo pasar día tras día, por mi puerta, a mi lado. Cruzamos pocas palabras y las miradas dicen mucho menos. Para mi desgracia o  para buena suerte tuya estamos unidos por siempre, o al menos lo que dura esta vida.

Ojalá todo en tu vida sea perfecto, quizá lo mereces , quizá yo también. Tengo que darte más gracias que reproches estúpidos e infantiles. Guarda lo bueno, lo feo. lo que te sirva, lo que te plazca, como es tu costumbre. Pero si un día aprendes a pedir perdón. búscame que quizá yo haya aprendido a olvidar. 

¿Y quién dijo que el amor dura para siempre? Yo solo quería que me pidieran perdón… Que me dieran un poco de razón ¡Que tonta! ¡Por Dios, que estúpida! 

No vuelvo a olvidar que no vas a cambiar. Ni siquiera la muerte te hace recapacitar ¿Rencor? Se me va a pasar Yo no me quiero arruinar. No me quedan ganas de gritar y ya no quiero llorar. Que ironía… a quién busca paz le toca guerra.