Me veo en la penosa necesidad de informarte que tu vocecita me tiene aturdida, me rehúso a seguir con la estúpida cruda moral y los remordimientos. A pesar de todos los estragos que has causado en mi mente quiero demostrarte que no te guardo rencor te otorgo unas vacaciones permanentes.
¿Qué dices?
¿Te irás?
No hay comentarios:
Publicar un comentario